Thomas Treutler“Todo va a cambiar debido a COVID-19”.
“Después de COVID-19, todo volverá a regresar a lo normal …”
Dos puntos de vista aparentemente diferentes sobre el futuro … y ambos podrían ser correctos. En este artículo haré un análisis estructurado de cómo COVID-19 afectará la Educación Superior en los Estados Unidos y el resto del mundo.
Educacion Superior Pre-COVID-19
Contrariamente a la teoría, la educación superior, tal como se aplica hoy, no considera el aprendizaje como un proceso continuo sino como una actividad realizada durante un tiempo limitado, que toma entre 3-5 años para un programa de pregrado y entre 6-24 meses para un programa de posgrado. Podemos dividir este proceso en tres (3) fases principales:
- Antes (obtener acceso al programa educativo)
- Durante (acceso al programa educativo en el campus)
- Después (dejando la institución educativa)
Antes:
Los estudiantes requieren realizar tareas específicas para obtener acceso a programas de educación superior. Estas tareas suelen ser altamente selectivas, con pruebas estandarizadas y centralizadas en el centro de este “control de acceso”, asegurándose de que solo los mejores candidatos lleguen a las instituciones de educación superior. Por una variedad de razones, los modelos alternativos para demostrar la valía para poder acceder a las universidades se han eliminado con el tiempo y hoy la gran mayoría de las universidades requieren estas pruebas estandarizadas.
Durante:
Se han desarrollado diferentes modelos en torno a esta “experiencia de aprendizaje” en el campus, pero los modelos se ven muy similares, ya sea que viva en Boston (Massachusetts) o Boston (Medellín). Los factores que pueden o no tener un impacto en esta experiencia de aprendizaje son:
- Infraestructura
- Profesores
- Interaccion Social entre Estudiantes
- Interfaz con la industria y el gobierno
- Modelos educativos
- Oportunidades de Trabajo
Después:
La mayoría de los estudiantes todavía creen que están “aprendiendo ahora”, una vez que dejan la universidad. Se otorgan títulos de por vida, sin considerar los cambios y el desarrollo continuo en casi todas las áreas del conocimiento. Muchas instituciones y personas confían ciegamente en los títulos, creyendo que un título universitario en arquitectura solo sirve para diseñar casas.
Los problemas de este sistema son múltiples y se han investigado y documentado ampliamente, ya sea antes, durante o después de la experiencia en el sistema de educación superior. [1] – [7]
Muchos intentos de implementar cambios en la educación superior para superar esas dificultades se han intentado en el pasado, basados en argumentos en torno a “no hay dinero“, “no es el momento adecuado“, “nadie quiere eso“, “eso es demasiado arriesgado” y “siempre lo hemos hecho DE ESTA manera“.
Y luego vino COVID0-19
De repente, y sin previo aviso, el cisne negro [8] ahora está parado en nuestra puerta y no hay forma de evitarlo. COVID-19 está creando una nueva realidad (¿temporal?) A la que todos tienen que responder. Y todos lo hacen. Es un mundo nuevo y valiente.
Antes:
De la nada, no se pueden realizar pruebas estandarizadas y las universidades tendrían que:
- cancelar el siguiente semestre: porque los estudiantes no pueden cumplir con sus requisitos de ingreso y presentar resultados de exámenes estandarizados, o
- encontrar alternativas para determinar qué estudiantes pueden ingresar a la educación superior
Enfrentando estas dos opciones, sorprendentemente, encontrar alternativas no suena tan mal y muchas universidades están decidiendo no requerir exámenes estandarizados SAT o ACT.
Durante:
Dado que el distanciamiento físico es un nuevo requisito, la educación superior se da cuenta de que puede:
- ofrecer cursos en línea o
- no ofrecer ningún curso en absoluto
Todas las instituciones han encontrado formas de responder a esto y lo que se había opuesto por el personal administrativo y muchos docentes durante más de una década, ahora se ha implementado para casi* el 100% de la población estudiantil en una semana o menos.
* (Hay universidades que han seguido el modelo presencial, pero utilizando espacios mas amplios. ej. Nanyang Singapore)
Después:
Esta es un área en la que no hemos visto la presión inmediata del cambio que va más allá de la cancelación de una ceremonia de graduación o la realización de la misma en línea o el uso de un robot / modelo virtual combinado [9]. Sin embargo, con cada vez más servicios que se trasladan en línea, podría ser solo una cuestión de tiempo que las universidades cambien a certificados totalmente digitales.
Lo descrito anteriormente muestra la reacción de las instituciones de educación superior durante COVID-19. Sin embargo, la pregunta más importante es:
“¿Qué sucede después de COVID-19?”.
Aquí volvemos a las creencias expresadas anteriormente, que “las cosas volverán a regresar …” y “las cosas cambiarán para siempre“
¿Cómo puede ser que ambas afirmaciones sean ciertas? En el comportamiento humano, como en los sistemas físicos, observamos regularmente algo que se describe como histéresis, el fenómeno en el que el valor de una propiedad va a la zaga de los cambios del efecto que la causa. Podemos observar este tipo de comportamiento, por ejemplo, en imanes, al cambiar las polaridades. Pero también podemos observar esto en el comportamiento humano, una vez que se han desarrollado nuevos hábitos.
Es muy probable que observemos este tipo de histéresis conductual en muchos de los grupos de interesados en la educación superior. Visualizando esta histéresis, eche un vistazo a la Imagen 1, que muestra un comportamiento simulado y proyectado a lo largo de un eje Y que muestra los niveles de cambio frente a un eje X que muestra el tiempo.
Imagen 1: Capacidad para cambiar e innovar las instituciones de educación superior y la influencia de COVID-19
La zona A (gris: breve cuarentena COVID-19) muestra el nivel de cambio e innovación pre-COVID-19, con un cierto nivel de innovación, en este caso, por ejemplo, en la virtualización de programas.
La zona B (rojo: cuarentena prolongada de COVID-19) muestra la reacción del sistema (educación superior) a COVID-19, un repentino “salto cuántico” en el desarrollo, alcanzando niveles o cambios que muchas instituciones no han observado en las últimas décadas.
La Linea Roja muestra cómo el desarrollo y la innovación podrían haber avanzado sin un evento significativo como COVID-19
La zona C muestra el tiempo posterior a COVID-19, cuando “las cosas se retrasarán” y, sin embargo, debido a la histéresis en el comportamiento humano, no volverán a los niveles anteriores y no volverán a tocar la Línea Roja.
La Línea Amarilla muestra el potencial desarrollo futuro (escenario A) asumiendo que el cambio y la innovación continuarán en una trayectoria paralela a la que observamos en la Línea Roja.
La Linea Verde muestra una visión más optimista (escenario B) donde la histéresis no solo nos dejó en un nivel más alto, sino que la tasa de innovación también aumentó y la trayectoria se hizo más pronunciada.
La Linea Azul muestra una visión que se podría realizar con una cuarentena prolongada. Si distanciamiento físico sigue durante varios meses, las instituciones estarían mejorando e innovando sobre su oferta virtual (sube la linea). Por una exposición prolongada a nuevos conceptos y una innovación acelerada, se mejorará la innovación futura sobre la histeresis inicial, cuando termina la cuarentena.
¿Qué tiene que pasar para tener el escenario A o el escenario B?
Suponiendo que no se impondrán limitaciones legales significativas en las reuniones de grandes grupos de humanos en el futuro (existe una probabilidad distinta de cero de que esto pueda suceder) la reacción inmediata de tres (3) grupos de partes interesadas (stakeholder) determinará qué escenario se convertirá en realidad :
- Estudiantes: ¿Los estudiantes aprecian las ventajas del aprendizaje en línea en la medida en que solicitan que se entregue más contenido educativo en este formato? Aquí tenemos que tener en cuenta que la entrega de contenido en línea durante COVID-19 es subóptima, lo que significa que ni el contenido ni los métodos de entrega se han desarrollado y ajustado lo suficiente. Bajo una cuarentena prolongada, podría surgir una Línea Azul (escenario C).
- Personal académico: ¿Los docentes aprecian las ventajas de la enseñanza en línea en la medida en que sean más abiertos y realmente soliciten activamente a las universidades que ofrezcan cursos en línea? Observando el impacto positivo que los docentes pueden tener con este método de entrega a lo largo del tiempo, la Línea Azul también se vuelve más probable desde el punto de vista de los docentes.
- Personal administrativo: si el personal administrativo aprecia o no las ventajas de la enseñanza en línea se vuelve menos importante cuando se tiene en cuenta que la infraestructura instalada (edificio, campus, aulas) representa un factor de costo significativo que no se puede ignorar. Cuanto más tiempo tarda COVID-19, más urgente se vuelve este problema. Las instituciones que encuentren soluciones innovadoras para adaptarse a un menor uso de la infraestructura física probablemente serán las ganadoras del período posterior a COVID-19 (2020-2025).
Aunque desde el punto de vista de la innovación en las instituciones será preferible la Linea Azul, ese implicaría también una prolongación del sufrimiento en gran partes de la población. Por esta razón solo estoy mirando aqui al escenario a y b.
Volviendo a las declaraciones iniciales
SÍ: “Todo va a cambiar debido a COVID-19”. (Todo siempre cambia … ¡no es magia!)
SÍ: “Después de COVID-19, todo volverá a retroceder …” (¡pero no a los niveles anteriores!)
Las instituciones tienen una oportunidad incomparable de ingresar a la Línea Verde o la Línea Azul. El profesorado y el personal administrativo deben seguir presionando para cambiar para mantenerse a la vanguardia y no quedarse atrás en esta ola de disrupción innovadora que no hemos visto anteriormente en nuestra vida.
Con este cambio, las instituciones deben buscar formas de innovar dando pasos pequeños pero determinados: implementando nuevas formas de evaluar a los candidatos (Antes), innovando en la educación continua omnicanal (Durante) y utilizando tecnologías disruptivas seguras para documentar los logros académicos de los estudiantes (Después )
Este articulo fue publicado en ingles en el blog de Certix LLC. [LINK] Certix está trabajando con instituciones académicas preparándoles para un futuro posterior a COVID-19, evitando completamente el fraude en títulos y certificados académicos. Si está interesado en aprender más sobre cómo puede preparar a su institución para títulos seguros | certificados, mientras reduce significativamente los costos para mantener la integridad de sus títulos, escríbanos.
Thomas Treutler
